Asómate al mundo exterior...Y VERÁS TODO LO BUENO QUE TIENE!

Asómate al mundo exterior...Y VERÁS TODO LO BUENO QUE TIENE!
Asómate a la ventana y mira, escucha, habla...y comparte conmigo tus impresiones.

"Hermanos, comencemos, ya que hasta ahora poco o nada hemos hecho..."

Un gran Santo, el más pobre en lo material, pero el más rico en lo espiritual dijo en su lecho de muerte: "Hermanos, comencemos, ya que hasta ahora poco o nada hemos hecho...". Ese gran Santo era Francisco, y si él dijo no haber hecho nada, ¿que hemos hecho nosotros? Empecemos a hacer algo para cambiar el mundo, ¿no os parece?

Eres el visitante número:

Busca aquí lo que quieras

martes, 14 de febrero de 2012

DOMINGO: GRAN HOMILÍA, DESCANSO Y HOMENAJES... (no lloréis)


         Hoy, como el pasado domingo, asistí a la Eucaristía de la Iglesia de Virgen Asunta, para ver cómo están los ancianos y las hermanas. Así de paso, también saludo al padre Casteli, que es así como se llama el sacerdote inglés del que os hablé y que no me acordaba.

        Las lecturas de hoy, domingo sexto del tiempo ordinario, hablan de cómo en la época del antiguo testamento, el que contraía lepra era un excluido de la sociedad de entonces, hasta el punto de que debía gritar que era impuro si notaba que alguien se le acercaba. Además, tenían que ir con las ropas descosidas y con la boca cubierta.

         Pero en la lectura evangélica, Jesús muestra un cambio radical en la sociedad de la época, dando ejemplo de misericordia y de haber venido a establecer la justicia con los más desfavorecidos, sin importarle las leyes ni los comentarios que pudiera suscitar en una sociedad corrupta e injusta. Obró con un leproso el milagro de su curación en un acto de misericordia, mientras que la propia sociedad le excluía mientras seguían practicando sus cultos religiosos.

         Ese es el gran cambio que vino a traer Jesús, y por eso desde entonces dijo que “lo que hagáis con uno de estos me lo estáis haciendo a mí...” refiriéndose a los pobres, enfermos, ancianos y demás estorbos de la sociedad.

           Pues bien, hoy en la homilía dominical, el padre Antonio se ha despachado a gusto. Como de costumbre, empieza con sus gritos de guerra que el pueblo responde al unísono...

¡¡Nos reunimos hoy domingo como....!!

Y el pueblo responde: ¡¡Comunidad...!!

¡¡Y cómo....!!

Y todos: ¡¡...Iglesia...!!

Entonces noto como echa una mirada pícara hacia donde estoy yo, como riéndose, lo cual me hace sospechar que ha leído la publicación del peregrino donde comentaba este aspecto... ¡qué pájaro!... y acto seguido comienza su homilía, no sin antes sacar los colores a una familia que por primera vez viene a esta misa y los saca a todos delante del altar para darles la bienvenida con un aplauso del repetable... cual toreros haciendo el paseillo, se dirigen hacia él a presentarse, mientras yo resoplo tranquilo porque esta vez no me ha tocado a mí...

Tras presentarnos a la familia de la Renovación Carismática Católica procedente de Trujillo (el de Perú, no el de España) comienza su homilía...

  Dijo algo así:

         “Aquí en Chachapoyas hay muchas personas que sienten vergüenza a expresar su fe ante los hermanos. Aquí hay muchos hombres que se sienten avergonzados por expresar su condición católica. Incluso hay mujeres a las que les da reparo también revelar sus creencias religiosas, porque el mundo de hoy, a veces, no ve con buenos ojos a estas personas... No nos tiene que importar el qué dirán o el qué pensarán, porque nuestra condición de católicos no es para nada un motivo de vergüenza, sino más bien de todo lo contrario, de orgullo y de alegría... y dicho esto, voy a comentar las lecturas:

... en la sociedad de Israel había excluidos sociales por causa de la lepra, esa enfermedad que hoy día está prácticamente erradicada, hasta el punto de que tenían que gritar ¡¡impuro..., impuro....!! cuando alguien se acercaba para dar muestras de que estaba contagiado. Esa era su obligación. Y esas personas que eran abandonadas sufrían más quizás por la marginación que por la propia lepra.

         En esta sociedad avanzada actual, nosotros también tenemos leprosos que andan por nuestras calles, aunque no tengan lepra. Son los marginados de la sociedad. Nosotros mismos hemos sido marginados alguna vez y sabemos lo que se sufre por ello. A veces los niños llegan a casa contándole a sus padres que tal o cual profesor no le ha tenido en cuenta, o alguna situación similar, y sufren por ello. Sin embargo, hoy día tenemos muchos marginados sociales, como son los ancianos, los enfermos, los pobres, los alcohólicos, los drogadictos, etc...

         Hoy actuamos de modo similar a como nos muestra el libro del Levítico, rechazando y marginando a quienes consideramos un estorbo para nuestra sociedad. Hoy los que controlan el mundo llegan a controlar hasta que la situación económica tenga una oferta inferior a la demanda, teniendo así asegurado un bienestar para esas personas de los países avanzados con gran capacidad económica y de poder. Es decir, que nuestra sociedad resulta que no ha avanzado tanto con respecto a la del Israel de Jesús.

         El hombre de hoy ve en el otro un competidor, en lugar de un hermano, y así predomina la competitividad sobre la solidaridad. El hombre de hoy es un hombre de lucro, y así, predomina también el lucro sobre el servicio. A nadie hoy, o a casi nadie, se le ocurre servir en lugar de ser servido.

         Pero Jesús cambió las reglas. Rompió los esquemas, y sin importarle la sociedad en la que vivía y sus normas, curó al leproso, así como a muchos otros enfermos, porque Él antepone el servicio al lucro, la misericordia a la competitividad.

         Nosotros tenemos que cambiar esta realidad, y ser conscientes de que los más necesitados son los que Jesús más quería, y por quienes se hizo hombre. Por eso tenemos que acoger, escuchar y no marginar a nuestros hermanos, porque acordaos de que Jesús dijo que lo que hiciéramos con cada uno de esos, sus hermanos, se lo hacíamos también a Él...”

         Y dicho esto, concluye con varios gritos que ya tiene ensayados con los fieles.. entre todos ellos, me quedo con uno grabado que dice:

         ¡¡Iglesia en Chachapoyas...!!

         A lo que todos responden...:¡¡Tu vida es misión...!!

         Terminada la misa, regreso al Obispado porque tengo que comunicarme con todos mis amigos por internet. Aprovecharé para subir al peregrino mangurrino todas las entradas pendientes de subir.

         Por la tarde, lo más divertido es ver un partido del Madrid contra el Levante... le saca 7 puntos al Barcelona, y aunque parezca mentira, aquí en Perú, la cosa está dividida... después del partido, que gana el Madrid y se pone a 10 puntos del Barcelona, salimos a tomar algo Amado y yo. Hemos ido a una cafetería algo discordante con el resto del lugar, pues parece un poco de lujo... y un café con leche (¡¡por fín!!) después, le acompaño a la farmacia... parece que se ha resfriado con el chapuzón del Gocta de ayer. Yo, incomprensiblemente, no noto nada... En condiciones normales, estaría en cama, pero aquí parece que aguanto más...

         Hoy domingo, la misa es de 20:30 horas, y aunque ya he ido esta mañana, voy de nuevo por mis intenciones y las de mi gente de Almendralejo, mi hermana y Jorge, mi madre, las hermanas de Navas del Madroño y las de Almendralejo, mi grupo del Centro Juvenil y varias más... y tú que estás leyendo, también... que sepas que en Perú alguien pide por ti mientras duermes....

         Y como hoy es un día como de transición, aprovecho para hacer lo que ya debería haber hecho días atras: Dar las gracias...

    Primero al Centro Juvenil Francisco y Clara de Almendralejo y a todos sus miembros... mayores y niños... desde las hermanas Clarisas, a cuyo frente está la Madre Inmaculada, pasando por Sor Catalina, recién llegada y a la que todavía no he podido ver porque vino un día después de haber viajado yo... y así Carmen, Nina, María José, Pepi, Leo, Sonia, Luis, Juanito, Juan Latín, Santi y María. Especial mención merece la madre Inmaculada, la cual es la chispa que, junto con mi hermana Loli y mi madre, prendieron la llama que a día de hoy, y gracias a Dios, todavía no se ha apagado.
        No quisiera olvidarme de nadie, pero como ya me he metido en "fregaos", también quiero agradecer a Don Miguel Caballero, por su apoyo material y moral, a Luis Díaz, a Antonio Izquierdo y Hortensia, a la Madre Inés, María Fe, Inesita y Silvia, por supuesto a Don Rafael Corraliza, que también ha colaborado en la causa, y a Don Juan Francisco, al cual he dejado un poco "de aquella manera", pero que seguro sabe perdonarme... 

        Y, por supuesto, cómo no, a mi querida Loli Prieto y su marido Diego Lamoneda, que tanto disfrutan al saber que estoy bien y lo que estoy haciendo.... (me lo ha dicho un pajarito).

        Gracias a ellos estoy yo aquí, ya no solo por lo material, sino también por haberme apoyado en todos los sentidos, hasta haber tomado, incluso, las riendas de mi grupo de confirmación... 

         Antes de viajar, mis compañeros del Centro Juvenil me dieron una despedida muy bonita, en la que me regalaron una foto que ellos no lo saben, pero que siempre está conmigo, y la oración de la Madre Teresa de Calcuta que eligieron para poner detrás no podía ser más acertada. Dice así:

Señor, cuando tenga hambre,
dame alguien que necesite comida;
cuando tenga sed,
dame alguien que precise agua;
cuando sienta frío,
dame alguien que necesite calor.

Cuando sufra,
dame alguien que necesite consuelo;
cuando mi cruz parezca pesada,
déjame compartir la cruz del otro;
cuando me vea pobre,
pon a mi lado algún necesitado.

Cuando no tenga tiempo,
dame alguien que precise de mis minutos;
cuando sufra humillación,
dame ocasión para elogiar a alguien;
cuando esté desanimado,
dame alguien para darle nuevos ánimos.

Cuando quiera que los otros me comprendan,
dame alguien que necesite de mi comprensión;
cuando sienta necesidad de que cuiden de mí,
dame alguien a quien pueda atender;
cuando piense en mí mismo,
vuelve mi atención hacia otra persona.

       Pues bien, nada más acertado para el viaje que iba a emprender, y ahora aquí, resulta que cada una de las frases adquiere un sentido especial... ni una sola de ellas queda vacía en esta tierra andina.

        Por eso, yo también os quiero dedicar una oración especial, también de la madre Teresa, que sin querer me he encontrado y quiero compartirla con vosotros:


      Y así, ahora sabéis que las renuncias no lo son tanto.... y que no puedo estar más contento que haciendo lo que estoy haciendo... Vuestra oración me enseña cada día mi trabajo aquí, la mía me recuerda que cada hermano peruano es el mismo Jesús.... y por supuesto, os la dedico.

    Y después de esto, tengo que hacer mención también de Elena Sánchez, del MCC de Badajoz, la cual también me ha dado todos los ánimos del mundo, allí y aquí a través de los medios, al igual que su marido Raúl... También quiero agradecer a Pilar Elías, Pili Agudo, Rosa Murillo, Teresa Jaraquemada y Feliciano Leal, el apoyo que a través de Facebook me están dando. 

     He de decir que tengo hasta el apoyo de algunas personas con gran fondo, como son Mario Cano y Rafael Díaz..., a las cuales su apoyo se lo agradezco por partida doble... ellos saben porqué... 

     Y aquí os dejo la foto que me traje... y aunque no salís todos en ella, no importa... estáis aquí conmigo igual... 

El hermano Andrés Esperilla también forma parte de este grupo...  

         Hasta mañana!!

3 comentarios:

  1. Jolin,no te lo vas a creer , pero me he emocionado y todo, de verdad que eres el mejor, sigue asi, porque nos ayudas a nosotros a continuar nuestra tarea en todos los sentidos.Tu testimonio, entrega y generosidad son dignas de admirar, animo, adelante y ULTREYA!!!!! no decaigas en tu entrega, muchas personas se estan sirviendo de ti para ser felices, que grande es eso,Martin, y cuando tengas alguna cosita no dudes en dar un toque o un aviso, de verdad , animo y sigue con tu tarea para los que estamos aqui sigamos aprendiendo.,, anda que cuando vuelvas tendremos que quedar un finde entero para que nos cuentes. Un besazo de colores.Pilar Elias

    ResponderEliminar
  2. querido amigo,
    que bueno poder contar con amigos asi, desde aqui te mando todo mi apoyo, que cuando te encuentres un poquito mas "plof" te acuerdes de nosotros y es como si de alguna manera te abrazaramos.
    Disfruta mucho, abre bien los ojos, de aquellas gentes se aprende mucho, rie, llora... y come, eh? jajajjaja.
    en serio, que animo!! le diremos a Pili que vuelva a ser la coordinadora de otro cursillo para que como ella dice poder pasar un finde juntos y nos cuentes.
    un abrazo muy muy fuerte
    un beso
    cuidate
    Elena Sanchez

    ResponderEliminar
  3. Las gracias te las damos nosotros a ti, por todo lo que nos estas transmitiendo desde allá, no imaginabamos hasta que punto tu misión, de alguna forma iba a ser tambien nuestra.
    Como dice tu amiga Elena, si en algún momento te encuentras mas "plof" piensa que tus hermanos estan siempre contigo, apoyándote y queriéndote.
    Un abrazo muy fuerte
    Centro Juvenil Francisco y Clara
    Hermanas Clarisas

    ResponderEliminar