En la mañana salgo a dar una vueltecita por el mercado, que siempre me gusta, y tiro algunas fotos.. siempre procuro sacar fotos de cosas cotidianas, de aquí, para que las veáis... ahí van algunas:
Mis queridos amiguitos.... |
Más Kuis en compañia de un pollo desafortunado... |
La lana de alpaca es la mejor, por lo visto... |
Siempre venden flores en el mercado, para el cementerio. |
La amiga Dori entregando un premio a una mujer como reconocimiento. |
Una pobre mujer que camina por las calles de Chacha... |
Así se vende la carne en el mercado municipal |
La Virgen María también presente en el mercado |
La misa es a las 18:30 en la
catedral. Hoy no fui a Virgen Asunta, porque me lié a hablar después del
desayuno y se me hizo tarde. Pero cuando voy a la catedral me llevo una grata
sopresa... Katy Piedehierro ha venido desde España, por fin... llevo tanto
tiempo esperándola que ya la echaba de menos incluso sin conocerla... Tengo
ganas de decirle que la madre Inmaculada me dio dinero y un libro para
traérselo y me lo olvidé en España..., pero que ya haré por remediarlo.
Está en misa, y no sé quien es... son
tantas con velo que cualquiera podría ser... descarto a algunas de raza más
morena, porque Katy es de Puebla de la Calzada y allí los rasgos indios no
predominan... pero estoy entre dos...
Cuando acaba la misa me quedo esperando
como un tonto en la puerta hasta que salga... sale la primera y no es...
lógicamente es la otra. Espero, espero más... y sigo esperando... y no acaba de
salir. Cierran la puerta de la catedral y me quedo con cara de bobo como
diciendo: “... no puedo creer que la hayan dejado encerrada ahí dentro...”,
pero resulta que el padre Antonio me dice luego que la sacristía tiene
comunicación directa con su convento, así que ya podía esperar sentado...
Bueno, mañana la veré..., yo me voy con
el padre Antonio a casa a cenar, pero justo a mitad de camino me llama el padre
Amado. Me comenta que le ha llamado Mardelis para que vayamos a cenar a su casa
porque cumple los años y estamos invitados. Tenemos que comprar un regalo, pero
a esas horas ya han cerrado las tiendas... Hombre, aquí trabajan hasta los
domingos por la tarde, pero no hasta tan tarde... son cerca de las nueve ya.
Entramos en la calle Amazonas, que es
de tiendas, y la única tienda que vemos abierta es una zapatería.. así que no
hay mucho donde elegir. Pero por esas extrañas coincidencias de la vida, nos
damos cuenta no sólo de que sabemos que necesita zapatos, porque en el viaje de
Yumbilla nos comentó que sus botas estaban rotas, sino que cuando pidió unas
prestadas a la chica de la casa donde cominos, dijo en voz alta a la chica que
le prestó las botas: “... qué suerte, tienes mi mismo número, el 36...”.
En esos momentos me vino a la mente esa frase y providencialmente encontramos
unas botas de montaña bonitas de señora del número 36. Será un buen regalo...
Tomamos taxi y nos dirigimos a su
casa... queda entre dos calles, algo extraño. Y como número de casa, nos dice
que es la que tiene un platanero en la puerta... imagínate al taxista decirle: “
... entre las calles tal y tal, donde un platanero...”. Pues así y todo
llegó, para que veas qué conocimiento de la ciudad tienen los tíos.
Entramos en la casa y nos invitan a un
licor de algo amarillo. Está bueno... Luego un vaso de gelatina. Yo no tomo
nunca gelatina, pero en todo caso, si la tomara, sería después de la cena...
aquí es antes. Después un plato con un filete de ternera, una especie de
menestra con mayonesa y arroz... No hay rastros de Kui por ningún lado... cosa
que celebro.
Terminada la cena, sacan una botella de
vino y un sacacorchos... y después de algunos intentos por varios bandos de
abrir el corcho, le dan la botella a Amado, el cual veo que tiene una técnica
poco depurada... Puede que termine abriendo la botella, pero a costa de sacarle
las muelas a la mujer que tiene al lado.. Viendo cómo maneja el sacacorchos, le
digo que así no es... Me pasa la botella y el sacacorchos, ya que había metido
la rosca hasta casi tocar el fondo de la botella... le digo que así no es. En
esto, el respetable mirando... estaban allí la madre, las hermanas, las amigas,
el marido de una amiga... y los niños. Todos viendo qué iba a hacer el español
con la botella y el sacacorchos... y cuando les explico el funcionamiento del
sistema de apertura, apoyando la parte que se apoya en el vidrio para sacar el corcho
sin esfuerzo, todos se quedan admirados igual que si hubiera hecho un truco de
magia... Están asombrados de que haya abierto la botella sin llenar el techo de
vino ni romperle la dentadura al vecino de al lado... entonces les explico el
funcionamiento del aparato y para qué sirve la muesca en el metal que se apoya
en el vidrio... y así acaba la clase de hoy: “Cómo descorchar una botella sin
provocar traumatismos ni avisar al pintor...”
Examinando las fotos que habíamos echado |
Negociando la tarta... |
A la hora de beber cerveza, soy el raro
porque tengo un vaso para mí solo, mientras el otro vaso disponible es
compartido por todos los demás... Uno se echa un poco de cerveza en su vaso,
bebe y se lo pasa al de al lado... pero antes vierte los restos del vaso en un
cuenco central, que al final de la velada tiene un litro de cerveza en restos
de vasos...
Los asistentes al cumpleaños número ¿?... eso sí es igual que en España: Secreto... |
Y con esto, nos vamos al Obispado, no
sin encontrarnos a algún que otro personaje variopinto por las calles
chachapoyanas... Ha estado bien. Hemos celebrado el cumpleaños, hemos visto al
renacuajo Christopher, le hemos dado nuestro regalo que ha sido todo un acierto
y, por último, nos hemos ido calentitos pa casa... Menos mal que vosotros
sabéis que esto es algo excepcional...
Hasta mañana!!
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