Un hombrecito normal da una lección de sabiduría y de cordura a tantos como se jactan de mover los hilos del mundo. Un solo hombrecito, pequeño ante la gran asamblea de los "pudientes" deja sin palabras a todos los que lo escuchan. Se le presenta en la película como el representante de la "República de los Copos", haciendo un paralelismo con lo que sería de minúscula esa república en caso de existir.
No pueden sino romper en unanimidad de aplausos una vez concluida la intervención, aunque durante la misma lo que más se escuchan son los vítores de unos cuando critica a los otros y los silbidos de quienes no gustan de escuchar la verdad de sus palabras.
Este fragmento, tomado de la película "Su excelencia", nos remueve las tripas por dentro porque hace más de 50 años que fue rodada, pero sin embargo, estas palabras toman el mayor de sus sentidos en este mundo "civilizado y avanzado" de la era del siglo XXI... Una era de gran avance científico pero de gran retroceso social...
Escucha bien cada una de las palabras de Cantinflas, no podrían ser más acertadas si se pronunciasen de verdad hoy mismo en la sede de la ONU.
Una buena reflexión para todos y cada uno de nosotros y un ejemplo a seguir el de este humilde representante ante la gran asamblea. A mí, particularmente, estas palabras me parece que diferirían muy poco de las que pronunciaría Jesucristo si se hiciera presente ahora entre nosotros.
Espero que os guste...